En el día de ayer se cumplió el 57º aniversario del fallecimiento de uno de los hombres más grandes que nos ha dado España, José Millán Astray, fundador de la Legión Española.
Un hombre que dedicó más de 60 años de servicio a su patria, servicio que marcaría sobre su cuerpo cicatrices y amputaciones. Heredero de una vieja estirpe de guerreros españoles, iniciada en la reconquista, continuada por toda Europa y medio planeta en las guerras imperiales, y finalmente inducida al coma tras su último derrame de gloria en las estepas del Norte.
José Millán Astray nació en La Coruña el 5 de julio de 1879. Su padre era un prestigioso letrado que ejerció distintos cargos en el Ministerio de Gracia y Justicia, donde llegó a Director de la Cárcel Modelo de Madrid. Ingresó a los 15 años en la Academia de Infantería de Toledo. Ascendiendo a Alférez con 16 años. Tras un primer destino en Madrid, ingresa por primera vez en la Escuela de Estado mayor, al estallar la sublevación en Filipinas, solicita suspender los estudios y ser destinado a la colonia.
Recibe el bautismo de fuego en el pueblo de San Rafael, en la Panpanga, donde se defendió con 30 hombres del ataque y asedio de un importantísimo contingente de insurrectos tagalos. Desde el 30 de diciembre de 1896, el segundo teniente Millán Astray, es un héroe nacional, se le recompensa con la Cruz de María Cristina, máxima condecoración al valor en aquellos tiempos. El 13 de julio de 1897, embarca en el vapor "Alicante" de regreso a la metrópoli.
En febrero de 1898 asciende a Teniente, ingresando de nuevo en la escuela de Estado mayor, que tiene que abandonar por ser destinado a Burgos, comenzando aquí su paso por numerosos destinos, hasta el 12 de enero de 1905 en que asciende a Capitán. Ingresa de nuevo y por tercera vez en la escuela Superior de Guerra para acabar los estudios de Estado mayor, obteniendo el diploma en julio de 1909 . Forma parte de la comisión hispano-francesa que confecciona el plano de la frontera entre ambos países.
El 3 de junio de 1911 es nombrado profesor de la Academia de Infantería de Toledo, en agosto de 1912 solicita destino a África, primero en comisión en la Inspección de las Tropas Indígenas, pasando luego por la Policía Indígena, Regimiento de. Serrallo 69, Batallón de Figueras, y finalmente a las Fuerzas Regulares, Tabor de Arcila nº 3. El Raisuni se alza contra la ocupación española.
El Capitán Millán Astray se distingue extraordinariamente en todas las acciones, probando una y otra vez su capacidad y virtudes militares. En 1914 asciende a Comandante por méritos de guerra y es destinado a Barcelona, pero en abril de 1915, de nuevo regresa a África donde toma el mando del 2º Tabor de Regulares de Larache. En abril de 1917 es destinado al Regimiento de. Saboya 6 en Madrid.
1919, año decisivo en su vida, porque en el comienza a vislumbrar la posibilidad de creación de una Unidad de extranjeros. Millán Astray habla con todo el mundo de su proyecto, lo hace popular, y un día solicita una entrevista con el Ministro de la Guerra, General Tovar, que ordena al Estado mayor estudie la posibilidad de crear un Cuerpo de Voluntarios extranjeros para la Guerra Colonial.
El informe es favorable, así como la opinión del Alto Comisario de España en Marruecos, general Berenguer. El 5 de septiembre de 1919 se designa al Comandante Millán Astray para desempeñar una comisión en Argelia, con el fin de estudiar el régimen y fundamentos de la Legión Extranjera francesa. Vuelve a España el 27 de octubre y entrega su informe. El 7 de enero de 1920 asciende a Teniente Coronel y el 28 del mismo mes un Real Decreto crea el Tercio de Extranjeros.
Desde este momento la vida de Millan-Astray estará íntimamente ligada a La Legión, sirviendo en ella sufrirá las heridas que mutilarán su cuerpo, su fama transcenderá las fronteras españolas y a su muerte será el único titulo que le acompañe, LEGIONARIO. El Teniente Coronel Millan-Astray imprime a La legión su carácter, basándose en el código de honor de los samuráis, el bushido, la dota del Credo Legionario, normas morales por las que habrá de regirse la conducta de todo legionario. Con el empleo de Teniente Coronel y Coronel, ejerce el mando, a su ascenso a General, el Rey Alfonso XIII le nombra Coronel Honorario del Tercio.
Durante la Guerra Civil, primero prestó servicio en el Departamento de Prensa y Propaganda, siendo muy importantes sus esfuerzos en la creación de Radio Nacional de España, desde el 23 de enero de 1937 fue responsable de la Dirección de Mutilados de Guerra, siendo su creador pues en nada se pareció al extinto Cuerpo de Invalidos, disuelto por el Gobierno de la República, fue un gran impulsor de los hogares para mutilados y ciegos.
Los últimos años de su vida los pasó consagrado al benemérito cuerpo de mutilados, muriendo en su sede el uno de enero de 1954.
¡Muera la inteligencia! ¡Viva la muerte!
sacado del blog de BASTION CANTABRO